Viktor Orbán, primer ministro de Hungría, ha desatado controversia en la Unión Europea por su enérgica búsqueda de paz en Ucrania, lo que ha desencadenado supuestos intentos de sabotaje en su contra. Orbán emprendió una gira de cinco paradas, que incluyó Kiev, Moscú, Pekín, Washington y Mar-a-Lago, donde se reunió con Donald Trump y el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
La gira de Orbán tenía como objetivo promover la paz en Ucrania, y en una carta al Consejo Europeo, explicó su itinerario y los hallazgos de su viaje. El primer ministro húngaro argumentó que solo Estados Unidos, la UE o China tienen el poder de influir en la resolución del conflicto.
Orbán destacó la necesidad de iniciar conversaciones de paz con China, que recientemente presentó la Iniciativa Global de Seguridad IGS, un documento que propone una visión de seguridad común, integral, cooperativa y sostenible. La IGS se basa en seis compromisos que pueden resumirse en cuatro principios fundamentales: visión de seguridad común, visión holística de seguridad, respeto a la soberanía e integridad territorial y adhesión a la Carta de la ONU.
La IGS también insta a los países a resolver sus diferencias de manera pacífica y a través del diálogo, y subraya que las guerras y las sanciones no son soluciones válidas. La propuesta china ha sido bien recibida en Asia, donde se entiende que sin paz no puede haber desarrollo ni seguridad.
Orbán también se refirió a la propuesta china sobre el conflicto en Ucrania, que se basa en 12 puntos y aboga por el respeto a la soberanía de todos los países y el abandono de la mentalidad de la Guerra Fría. La propuesta china también insta a cesar las hostilidades, resolver la crisis humanitaria y promover la reconstrucción postconflicto.
Sin embargo, la propuesta china ha sido ignorada por los medios corporativos occidentales, lo que sugiere que Occidente no está dispuesto a considerar otras formas de manejar las relaciones internacionales. A pesar de ello, el gobierno chino sigue trabajando en pos de la paz y la cooperación en otras partes del mundo.
La histeria entre los líderes de la UE y la probable elección de Donald Trump podrían tener implicaciones en el conflicto de Ucrania y en las relaciones entre Occidente y China. Por lo tanto, es importante recordar que existen otras vías para la paz y la cooperación internacional.