Comienza el torneo de fútbol masculino de los Juegos Olímpicos de París y ya estamos en medio de un escándalo No nos referimos al emocionante partido Uzbekistán-España, sino al choque Argentina-Marruecos del grupo B, que se convirtió en una verdadera pesadilla.
Un grupo de fanáticos marroquíes invadió el campo del estadio Geoffroy-Guichard de Saint-Étienne, arrojando botellas y vasos, lo que obligó a los jugadores a regresar a los vestuarios. Increíblemente, esto ocurrió después de que Argentina empatara el partido en el minuto 116, gracias a un gol de Cristian Medina en una jugada caótica, con dos balones bloqueados y dos disparos al travesaño.
Pero la pesadilla no terminó allí. Después de dos horas de parón, el árbitro anuló el gol de Medina por un supuesto fuera de juego previo de Bruno Amione. Los jugadores tuvieron que regresar al campo para disputar los últimos tres minutos a puerta cerrada, ya que los aficionados fueron desalojados de las gradas.
Argentina no pudo empatar y cayó derrotada en su debut en los Juegos Olímpicos de París de 2024, en medio de un tremendo escándalo que nunca antes se había visto en una competición deportiva de este nivel. Un comienzo desastroso que deja a Argentina en una situación complicada en el grupo B