En las últimas horas, dos madres fueron arrestadas en la ciudad de Córdoba, acusadas de haber infligido violentos castigos a sus hijos. La situación de los menores ha conmocionado a la comunidad y ha puesto en evidencia el problema de la violencia familiar en la región.
El primer caso se remonta a la noche del miércoles, cuando una mujer de 46 años fue detenida en el barrio Villa El Libertador, acusada de haber agredido a su hija de 14 años con un cinto, dejándola con cortes en el cuerpo. La adolescente fue trasladada de urgencia al Hospital de Niños para recibir atención médica.
El segundo incidente ocurrió en la madrugada del jueves en el barrio José Hernández, donde una mujer de 33 años fue arrestada después de atacar a su hijo de 10 años con un palo de madera de 40 centímetros. Los vecinos alertaron a la policía y los tres hijos de la mujer, de 10, 15 y 17 años, fueron trasladados al Polo Integral de la Mujer.
Ambas mujeres fueron acusadas de violencia familiar y enfrentan cargos penales por sus acciones. Sin embargo, este no es el primer caso de maltrato infantil en la región. Hace solo unas semanas, un hombre fue detenido en la localidad bonaerense de Bella Vista, después de que los vecinos lo escucharan golpeando a su hijo de 9 años y llamaran a la policía. El hombre había atado al niño de pies y manos en el patio de su casa, supuestamente porque se portaba mal.
Estos casos de violencia contra menores son una llamada de atención sobre la necesidad de abordar el problema de la violencia familiar en nuestra sociedad. La justicia debe tomar medidas enérgicas contra los agresores y brindar apoyo a las víctimas y sus familias. Además, es fundamental promover una cultura de respeto y no violencia en nuestras comunidades, especialmente hacia los niños y niñas más vulnerables.