Días de luto: La cercana de La Toretto, captada con el plantel de Estudiantes, luego de la desdichada colisión.

La indagación en el asunto de Felicitas Alvite, también conocida como La Toretto de La Plata, sigue avanzando y ha tomado un giro inesperado. El fiscal a cargo, Fernando Padován, ha solicitado la captura de Valentina Velázquez, una íntima amiga de la influencer, bajo la sospecha de que ambas participaron en una carrera ilegal durante la noche del trágico accidente.

En medio de este escándalo, resurgió una publicación de Velázquez en sus redes sociales, donde posaba feliz con los jugadores de Estudiantes después de su victoria contra Lanús en la Copa de la Liga. En el polémico tweet, que posteriormente eliminó, agradecía al equipo por brindarle un momento de alegría en estos días tan oscuros. La publicación fue compartida el 16 de abril, solo cuatro días después del fatídico accidente en el que Alvite atropelló y causó la muerte de Rubén Walter Armand 36, quien conducía solo una moto Baraj modelo Boxer.

La petición de detención de Velázquez se produce después de que se diera a conocer una pericia realizada el jueves por la tarde, la cual determinó la velocidad a la que Alvite conducía en el momento del siniestro. El informe accidentológico, elaborado por la asesoría pericial de La Plata, confirmó que la joven alcanzó una velocidad promedio de 83 kilómetros por hora en un tramo de 3000 metros. Como resultado, se estableció que Alvite superó en más de 20 kilómetros por hora el límite permitido en una avenida como la Calle 13 de La Plata. Además, en el informe detallado, se reveló que la influencer alcanzó los 90 kmh en un momento de su trayecto.

En cuanto a Velázquez, el fiscal la considera cómplice del delito de prueba ilegal de velocidad, según el artículo 193 del código penal, lo que implica la creación de una situación de peligro que pone en riesgo la seguridad pública. La solicitud de detención se produce después de reunir pruebas que demuestran que la joven recorrió un trayecto desde las calles 12 y 54, donde se detuvo junto al vehículo de Alvite, y luego continuó por la Calle 13 a una velocidad superior a los 80 kilómetros por hora.

Según El Día de La Plata, otro aspecto crucial en la investigación es el presunto intento de obstrucción a la Justicia por parte de Velázquez, ya que se comunicó con un testigo con la intención de organizar una reunión. Los investigadores sospechan que esto podría haber introducido una falsedad en su declaración, por lo que los agentes de la DDI de La Plata allanaron su hogar en busca de su teléfono celular.

Anteriormente, Velázquez había declarado una versión que coincidía con la de su amiga, afirmando que no estaban corriendo picadas y que sólo la estaba guiando hasta su casa en City Bell. Sin embargo, el giro inesperado de los acontecimientos ha puesto en duda su participación en el trágico evento.