
La noticia es sobre la formación de una alianza entre La Mayiza y Fausto Isidro Meza Flores, alias El Chapo Isidro, dirigida en contra de Los Chapitos para poner fin a su dominio en Sinaloa y restaurar la paz y el orden en la región. El anuncio se hizo a través de un comunicado en redes sociales, el cual incluía los emblemas de la facción de Ismael Zambada Sicarios y de la célula criminal que previamente perteneció al Cártel de los Beltrán Leyva.
Este anuncio coincidió con una oleada de violencia en diversas zonas de Mocorito, Guamúchil, Salvador Alvarado y Angostura, así como en Culiacán, Mazatlán y Badiraguato, en el contexto de la guerra en curso entre las facciones del Cártel de Sinaloa desde septiembre de 2024. La alianza entre La Mayiza y El Chapo Isidro desafía la autoridad de Los Chapitos y destaca la volatilidad de las relaciones en el mundo del crimen organizado, donde inclusive los enemigos más acérrimos pueden unirse para salvaguardar sus intereses.
La enemistad entre La Mayiza y El Chapo Isidro se remonta a la ruptura entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel de los Beltrán Leyva en 2008, la cual se debió a acusaciones de traiciones, encarcelamientos y la muerte de uno de los hijos de Joaquín Guzmán Loera. Durante ese conflicto, Fausto Isidro Meza Flores consolidó su posición como uno de los principales miembros de confianza de los hermanos Beltrán Leyva.
El Chapo Isidro comenzó su carrera criminal en las filas del Cártel de Juárez en la década de 1990, pero sus actividades delictivas ganaron atención en 2011, lo que llevó a su conexión con 32 agentes corruptos de la policía en Ahome, Sinaloa, y su vinculación con el asesinato de 16 personas en Culiacán. Tras la muerte de Arturo Beltrán Leyva en 2009, los remanentes de su organización quedaron bajo el control de su hermano Héctor, quien nombró a El Chapo Isidro como su mano derecha y líder del grupo armado violento conocido como Los Mazatlecos.
El conflicto entre el Cártel de Sinaloa y el Cártel de los Beltrán Leyva alcanzó su punto máximo con la batalla de Tubutama en 2010, donde ambos grupos se enfrentaron por el control de la zona, que era un importante corredor fronterizo para el tráfico de drogas y migrantes a los Estados Unidos. Se estima que el Cártel de Sinaloa, liderado por Los Ántrax, un brazo armado violento, se impuso en ese conflicto.
Después de la detención de Héctor Beltrán Leyva en 2014, se esperaba que El Chapo Isidro asumiera el cargo de líder del Cártel de los Beltrán Leyva, pero en su lugar se retiró a Guasave, donde defendió sus operaciones. No fue hasta 2020 que El Chapo Isidro expandió su influencia a otras regiones de Sinaloa con la ayuda del Cártel de Caborca, liderado por Rafael Caro Quintero.
El Chapo Isidro ha mantenido un perfil bajo y permaneció neutral en el conflicto entre Los Chapitos y La Mayiza por el control de Culiacán. Sin embargo, su reciente alianza con el heredero del Señor de Sombrero ya está teniendo un impacto en el tablero criminal del país. Esta alianza ha puesto de manifiesto la imprevisibilidad de las relaciones en el mundo del crimen organizado y la constante necesidad de los cárteles de aliarse para asegurar sus intereses y mantener su dominio en las regiones en disputa.,