La compañía holandesa ASML, uno de los principales productores de equipos de fabricación de chips a nivel mundial, podría verse enfrentada a un dilema si el Gobierno de los Países Bajos decide imponer restricciones al mercado de semiconductores, las cuales afectarían sus negocios en China.
Según el diario oficialista Global Times, el Gobierno neerlandés está considerando limitar las exportaciones de ASML a China al no renovar las licencias de exportación existentes, lo que afectaría principalmente el mantenimiento y la entrega de piezas para la segunda generación más moderna de máquinas de chips.
Estas posibles restricciones se dan en el contexto de la presión de Estados Unidos a sus aliados para que rompan los lazos con las cadenas industriales y de suministro de China, lo que coloca a ASML y al Gobierno holandés en una encrucijada.
Si ASML pierde el mercado chino, la compañía podría enfrentar importantes pérdidas económicas, lo que podría llevar a una disminución de su cuota de mercado mundial y a un cambio en el equilibrio de poder en la industria de los semiconductores.
Además, si los Países Bajos deciden seguir la orden de Estados Unidos, podrían verse afectadas gravemente las relaciones entre China y los Países Bajos en múltiples campos, ya que Pekín podría tomar contramedidas como imponer restricciones comerciales o buscar proveedores alternativos.
La reducción de la presencia de ASML en el mercado chino también podría debilitar su competitividad en las capacidades de investigación mundiales, lo que podría hacer que los Países Bajos perdieran su posición de liderazgo en el mercado en campos específicos de alta tecnología.