Durante el pasado fin de semana, la Policía Foral de Navarra ha abierto diligencias contra 15 individuos por la comisión de diversos delitos y ha atendido un total de 33 accidentes de tráfico en los que han resultado heridas 10 personas.
Entre los delitos contra la seguridad vial, se han imputado a siete conductores por presentar tasas de alcoholemia superiores a los límites legales. En Burlada, una conductora de ambulancia retuvo a un conductor ebrio hasta la llegada de la patrulla, mientras que en Villatuerta, los agentes observaron un vehículo que se detenía antes de llegar al control y su conductor presentaba una tasa de 0,76 mgrl.
En Noáin, un conductor se dio a la fuga de un control de tráfico durante las fiestas y, tras ser interceptado, se comprobó que circulaba bajo la influencia de cannabis, anfetamina y metanfetamina, además de estar positivo en alcohol. En Cordovilla, un turismo chocó contra una valla protectora y su conductor se dio a la fuga, siendo localizado más tarde en Beriáin con dos delitos imputados.
Además, las patrullas han realizado diligencias en 33 accidentes viales, que se han saldado con 10 heridos leves. 14 de estos accidentes se produjeron en el ámbito de la comisaría de Pamplona y en tres de ellos, los conductores fueron imputados por alcoholemia penales.
En cuanto a la seguridad ciudadana, se han detenido a ocho personas por diversos delitos. Cinco de ellas fueron detenidas por delitos contra las mujeres, tres de los cuales agredieron presuntamente a sus parejas y dos incumplieron órdenes judiciales de alejamiento.
También se han producido tres detenciones por desobediencia a la autoridad y grave, incluyendo a un hombre que se negó a identificarse a la policía local en Corella y agredió a una agente. Por último, se movilizaron patrullas para mediar en peleas y altercados en nueve localidades de la región.