El antiguo practicante de kickboxing de origen británico-estadounidense ha sido sentenciado a cumplir arresto domiciliario por un periodo de 30 días.
Cabe mencionar que esta medida se da como resultado de un reciente incidente en el que el exdeportista se vio involucrado. Aunque las autoridades no han revelado mayores detalles sobre el caso, se sabe que el individuo deberá permanecer en su residencia durante el tiempo estipulado.
Esta situación puede servir como un recordatorio de que, incluso aquellos que han alcanzado un gran éxito en su carrera, no están exentos de enfrentar consecuencias legales cuando infringen la ley. Además, el arresto domiciliario puede ser una oportunidad para que el exkickboxer reflexione sobre sus acciones y tome medidas para enmendar su camino.