Durante el primer trimestre de 2024, los ingresos disponibles de las familias en España aumentaron un 1,5% en comparación con el trimestre anterior, superando el promedio del 0,9% de los 38 países miembros de la OCDE. Este crecimiento es parte de una tendencia positiva que comenzó en 2022, con un aumento del 8,9% en los ingresos de los hogares españoles desde el primer trimestre de ese año hasta el último de 2023.
Este crecimiento se produce en un contexto de descenso de la inflación, que bajó al 2,8% en julio, y de un crecimiento económico sostenido, con una tasa interanual del 2,4% prevista para 2024. Además, la creación de empleo y el aumento del 7,3% en los sueldos también han contribuido a este incremento en los ingresos disponibles de las familias.
Sin embargo, el crecimiento en la renta de las familias durante el primer trimestre del año no es tan notorio como el observado en el último de 2023, con un 3,74%. Aun así, el nivel de ingresos de las familias españolas se sitúa ligeramente por encima de los 30.000 euros anuales de media, un nivel superior al tope marcado en 2007, en plena burbuja inmobiliaria.
Es importante destacar que, aunque España ha experimentado un crecimiento interesante en términos relativos en los últimos trimestres, sigue situándose en las últimas posiciones en la eurozona en términos absolutos. Esto significa que, aunque la situación económica en España está mejorando, todavía queda mucho camino por recorrer para alcanzar los niveles de renta real de las familias de otros países de la eurozona.