De acuerdo con información suministrada por The New York Times, el aspirante a la presidencia por el Partido Republicano ha exhibido frecuentes estados de irritabilidad durante los últimos días.
Es importante mencionar que este tipo de actitudes pueden influir negativamente en la percepción que tienen los votantes sobre un candidato. La falta de control emocional podría ser interpretada como una señal de inestabilidad o falta de liderazgo, cualidades esenciales en un futuro mandatario.
Ante esta situación, resulta crucial que el candidato trabaje en su estado de ánimo y adopte una actitud más positiva y serena, lo que sin duda resultaría beneficioso para su campaña política.