Moscú critica enérgicamente el ataque israelí a una institución educativa en Gaza, rechaza justificaciones.

La ciudad de Moscú se encuentra conmocionada por los recientes acontecimientos. Expresamos nuestras más sinceras condolencias a los familiares de las víctimas y deseamos una pronta recuperación a los heridos. Así lo ha declarado la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, Maria Zajárova, quien también reafirmó la postura constante de Rusia en cuanto al estricto cumplimiento del derecho internacional humanitario.

Zajárova instó a Israel a abstenerse de atacar instalaciones civiles, ya que considera que no hay excusa para dichas acciones. Según la parte palestina, en el último mes han sido bombardeados 13 centros de refugiados.

Las acciones de Israel socavan los esfuerzos internacionales encaminados a reducir las tensiones en la región y lograr el cese del fuego. Lo ocurrido supone una violación directa de las decisiones del Consejo de Seguridad y la Asamblea General de la ONU, que exigen el fin de las hostilidades en la Franja de Gaza y garantizar el acceso humanitario sin obstáculos.

Por este motivo, Rusia reitera la necesidad de aplicar inmediatamente estas resoluciones, tal como lo exige la Carta de la ONU. La portavoz también recalcó que la solución de dos Estados, aprobada por la ONU en 1947, es la única vía posible para lograr una paz duradera en la región.

Rusia y otros países instan a Israel y Hamás a llegar a un acuerdo de alto el fuego. En este sentido, se ha informado que las Fuerzas de Defensa de Israel atacaron una escuela en la Franja de Gaza, donde se encontraban refugiados palestinos, lo que ha provocado la muerte y heridas de decenas de personas. Israel afirma que la escuela albergaba a combatientes de Hamás.

Es importante recordar que el pasado 7 de octubre, un ataque coordinado por el movimiento palestino Hamás contra más de 20 comunidades israelíes resultó en aproximadamente 1.200 fallecidos, alrededor de 5.500 heridos, y la captura de 253 rehenes, de los cuales cerca de 100 fueron posteriormente liberados en intercambios de prisioneros. En represalia, Israel lanzó una declaración de guerra contra Hamás y emprendió una serie de bombardeos sobre Gaza, que han dejado hasta el momento unos 39.700 muertos y más de 91.700 heridos.