Comienza la tormenta en el sistema bancario regional de los Estados Unidos La prestigiosa firma de inversiones, Pacific Investment Management Co Pimco, lanza una bomba informativa que ha pasado desapercibida para muchos, pero que deja al descubierto un escenario lleno de pesadillas para el sector bancario y la economía en general.
En un reciente informe, Pimco advierte sobre una ola de angustia que apenas está comenzando y que podría desencadenar un colapso masivo de bancos regionales en el país. La preocupación principal gira en torno a una alarmante concentración de préstamos inmobiliarios con problemas que están asfixiando a prestatarios de todos los tipos, desde centros comerciales hasta oficinas.
La Reserva Federal de los Estados Unidos ha mantenido elevadas las tasas de interés, lo que ha provocado un aumento en los costos de endeudamiento y, en consecuencia, un incremento en los índices de incumplimiento. Los pequeños bancos se encuentran en el ojo del huracán, atrapados en una espiral de deuda de la que les resulta difícil escapar.
John Murray, jefe del equipo global de bienes raíces comerciales de Pimco, advierte que los prestamistas se han quedado atrapados con activos difíciles de vender, mientras que los bancos más grandes han logrado deshacerse de algunos de sus activos de mayor calidad para evitar pérdidas más profundas.
El problema se agrava a medida que los préstamos en dificultades crecen debido a los vencimientos. Aunque los bancos podrían escapar de las dificultades inmediatas, todavía hay una deuda de más de 200 mil millones de dólares en préstamos otorgados por fondos de deuda en los Estados Unidos, los cuales vencen hasta 2025.
La Corporación Federal de Seguro de Depósitos FDIC ha identificado dificultades en 63 bancos estadounidenses, lo que indica que estas instituciones se encuentran al borde del colapso. La historia se repite, y las advertencias sobre posibles quiebras bancarias no solo provienen de Pimco, sino también de la FDIC.
La crisis financiera de 2008 demostró que el colapso masivo de bancos puede afectar a la economía en su conjunto. Si no se toman medidas urgentes, podríamos estar al borde de una nueva crisis que sacudiría los cimientos de la economía mundial. La tormenta está aquí, y es hora de tomar medidas