El segundo día del juicio por el femenicidio de Agustina Fernández en Cipolletti, Río Negro, estuvo repleto de sorpresas y declaraciones explosivas que ponen en aprietos al único sospechoso: Pablo Parra
Por la mañana, un excompañero de trabajo de Parra, José Lorenzato, desmontó la coartada del robo que Parra había inventado para desviar la atención de los investigadores. Increíble pero cierto Lorenzato afirmó que había comprado dólares a Parra en una o dos ocasiones y que, solo 16 días después del ataque, Parra le ofreció venderle 400 dólares porque tenía que comprar algo. Esto es un golpe bajo a la defensa de Parra
La historia de Parra es que Agustina fue asesinada por un ladrón, pero los hechos cuentan otra cosa. Parra dijo que Agustina fue atacada por un ladrón mientras él estaba fuera comprando, y que cuando regresó, la encontró gravemente herida en el suelo. Pero, oh, sorpresa, Parra también dijo que le robaron 1000 dólares y dos teléfonos celulares. Qué clase de ladrón deja vivir a su víctima después de robarle
Como si esto no fuera suficiente, una exnovia de Parra se presentó en la corte y solicitó que Parra saliera de la sala para declarar. La tensión era palpable en el aire La exnovia relató historias de violencia y acoso por parte de Parra, incluso llegó a decir que Parra espiaba su correo electrónico y la seguía en la calle. Esto es una pesadilla viviente
La pregunta que todos nos hacemos es: Por qué Parra intentó continuar con su vida normalmente después del crimen Acaso no siente remordimiento por lo que hizo
El fiscal Martín Pezzetta está decidido a demostrar que Parra mintió y que él es el responsable del femenicidio de Agustina Fernández. Es hora de que la justicia se haga cargo y se haga justicia por Agustina