Durante el pasado fin de semana, la Policía Nacional, la Policía Local de Palma y los policías alemanes han arrestado a un total de 260 individuos sospechosos de cometer robos en la Playa de Palma durante la temporada de verano. Este operativo ha resultado en la detención de más de 500 personas acusadas de diversos delitos, como lesiones, daños, delitos contra la salud pública, robos y agresiones sexuales. Sin embargo, la mayoría de los arrestos han sido por hurtos.
En un solo día de este fin de semana, la policía detuvo a ocho personas en Playa de Palma, cuatro de ellas de origen rumano, una marroquí y tres argelinos, todos sospechosos de cometer robos a turistas. Gracias a estas detenciones, se han recuperado los efectos robados y se han devuelto a sus propietarios.
Los sospechosos aprovechaban la oscuridad de la noche y la madrugada para robar a los turistas, eligiendo a sus víctimas con cuidado y robándoles sin ser detectados. Incluso llegaban a robar a varios turistas al mismo tiempo, ya sea aprovechando un descuido o mediante habilidosas técnicas. Los objetos más robados fueron bolsos, carteras, teléfonos móviles y otros efectos personales. La mayoría de los robos ocurrieron mientras las víctimas estaban distraídas en la arena de la playa, nadando o en la primera línea de la playa.
Este operativo de la policía es un claro ejemplo de la importancia de la colaboración entre fuerzas de seguridad para combatir la delincuencia y garantizar la seguridad de los turistas en zonas turísticas populares como Playa de Palma.