Un juez con sede en el Reclusorio Norte de Ciudad de México ha determinado la prescripción del delito de fraude genérico imputado a Carlos Ahumada, por lo que el empresario argentino podrá regresar a su país y quedar libre de dicho cargo. Durante la audiencia, que duró alrededor de tres horas, el juez Rubén Godínez Cerón resolvió que Ahumada no tendría que cumplir con la sentencia de un año, 10 meses y 23 días ni tampoco con la reparación del daño de 26 millones de pesos que solicitaba la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, ya que este último también había prescrito.
Tras la finalización de la audiencia, Carlos Ahumada agradeció al juzgador por haber resuelto de acuerdo a la ley y declarar prescrito el delito que se le imputaba. El empresario no hizo declaraciones al salir de los juzgados y se retiró en compañía de su hijo Carlos Emiliano.
El abogado de Ahumada, Enrique Ostos, explicó que su cliente regresará a Argentina para continuar con su vida laboral, ya que no tiene ningún otro proceso en su contra en México. Ostos también detalló que el juez había señalado a los ministerios públicos de la fiscalía por no haber realizado los trámites necesarios para el cobro de la reparación del daño, lo que llevó a que también se declarara prescrita.
El delito de fraude genérico se refiere a la obtención de un beneficio económico a través de engaños, mentiras o manipulaciones. Las penas y castigos por este delito varían dependiendo de la forma en que se haya cometido y del valor de lo defraudado. En el caso de Carlos Ahumada, se le acusó de fraude genérico por presuntamente obtener beneficios económicos mediante engaños y manipulaciones.
La fiscalía capitalina aún puede presentar una apelación, pero Ahumada cuenta con una suspensión definitiva que frena cualquier orden de reaprehensión o de captura que exista tanto en el orden local como en el federal.