La vicepresidenta de los Estados Unidos, Kamala Harris, ha experimentado una transformación notable en su popularidad, pasando de ser una de las vicepresidentas menos populares en la historia moderna del país a una figura muy poderosa dentro del Partido Demócrata. De acuerdo con las encuestas actuales, Harris se encuentra empatada técnicamente con el expresidente Donald Trump, lo que indica que la batalla entre ambos será reñida.
Los estados en disputa, también conocidos como swing states, serán clave en esta elección. Estos incluyen estados alrededor de los Grandes Lagos, como Wisconsin, Minnesota, Illinois, Pensilvania y Ohio, así como estados en la franja solar, como Arizona, Nuevo México, Nevada y Georgia. En mi opinión, el impacto de los programas de los candidatos, junto con factores como raza y género, serán decisivos en estos estados. En los estados alrededor de los Grandes Lagos, el voto de los trabajadores de cuello azul tendrá un papel importante, mientras que en los estados de la franja solar, el voto de los latinos, especialmente de los mexicanos, será crucial.
Tanto Harris como Trump tienen vulnerabilidades significativas y representan visiones opuestas de un país que está más que polarizado, sino fracturado. La elección de este año no solo definirá quién ocupará la presidencia, sino también quién tendrá el control del futuro de los Estados Unidos.
En cuanto a la economía, la administración de Biden ha tenido dificultades, y la política migratoria de Harris también ha sido criticada. Sin embargo, la vicepresidenta tiene una fuerza innegable en el voto femenino y su agenda de libertad reproductiva, que incluye el derecho al aborto. Por otro lado, Trump puede haberse precipitado al seleccionar a un hombre como su compañero de fórmula, lo que podría llevar a una guerra de géneros o de clases.
En resumen, la elección de este año en los Estados Unidos será una de las más reñidas y decisivas en la historia reciente del país. Los estados en disputa y los programas de los candidatos serán cruciales para determinar quién ocupará la presidencia y quién tendrá el control del futuro del país.