En la región de Alicante, España, la Policía Nacional ha arrestado recientemente a cinco individuos, cuatro hombres y una mujer, en las localidades de Elche y Dénia, acusados de varios delitos que incluyen robo con fuerza, hurto de automóviles y pertenencia a una organización criminal. Esta banda, con operaciones en toda la Comunidad Valenciana, se especializaba en el robo de viviendas, con un enfoque particular en zonas turísticas donde extranjeros alquilan o poseen propiedades.
Su modus operandi involucraba el robo de joyas, vehículos y otros artículos de alto valor en el mercado negro. Los objetivos principales de la organización eran propiedades con cajas fuertes, y los miembros contaban con un alto nivel de conocimiento y habilidad en la apertura de estas.
La investigación comenzó cuando la policía identificó a dos sospechosos sospechosos de participar en seis delitos y potencialmente vinculados a una organización criminal dedicada a robos en viviendas. Tras una extensa investigación, la policía logró identificar a otros tres sospechosos, lo que condujo a la detención de tres miembros de la organización.
Durante una redada de rutina, la policía detuvo a uno de los sospechosos mientras supuestamente conducía un vehículo robado con las llaves que habían sido sustraídas durante un robo en una vivienda. Esta detención permitió a la policía vincular definitivamente al tercer sospechoso con la organización.
La policía continuó con la investigación y finalmente arrestó a los dos últimos miembros de la organización en Dénia, cerca de un local hostelero que regentaban. Durante los registros domiciliarios y en el local, la policía incautó herramientas, teléfonos móviles, relojes, máquinas troqueladoras para hacer llaves, varias copias de llaves de automóviles, joyas y complementos de moda.
Tras el análisis de las pruebas, la policía determinó que la organización estaba compuesta por cinco individuos con un claro reparto de funciones y una gran capacidad de movilidad geográfica. El grupo tenía un radio de acción que abarcaba toda la Comunidad Valenciana y contaba con un aguador, un especialista en apertura de puertas, un tercero con tareas de apoyo durante la entrada y dos miembros que se encargaban de verificar si en las viviendas había alguna persona el día del robo.
Los detenidos, de origen búlgaro, tenían antecedentes penales por delitos similares y fueron entregados a los juzgados de instrucción de guardia de Elche y Dénia. La investigación sigue abierta y no se descartan más detenciones.