Después de más de tres años de encarcelamiento, el exgobernador de Puebla, Mario Marín, finalmente abandonó el Penal del Altiplano para cumplir su condena en prisión domiciliaria en su lujosa residencia en la colonia Xilotzingo al sur de la ciudad de Puebla. Marín, quien fue acusado de ser el autor intelectual de la tortura de la periodista Lydia Cacho en 2005, continuará el proceso en su contra desde su hogar.
La defensa de Cacho ha acogido esta decisión judicial como una reafirmación de que la ley protege a aquellos que denuncian la tortura y el abuso de poder. Sin embargo, la periodista ha expresado su temor y ha cuestionado la decisión de la jueza Angélica del Carmen Ortuño Sánchez de permitir la prisión domiciliaria a Marín a cambio de una fianza de 100 mil pesos.
La periodista Lydia Cacho denunció en su libro Los Demonios del Edén una red de explotación sexual infantil en la que estaban involucrados políticos y empresarios, incluyendo al exgobernador Marín. Después de la publicación del libro, Cacho fue detenida y torturada por las autoridades en un caso que causó indignación nacional e internacional.
A pesar de que Marín fue detenido en 2021, no fue hasta agosto de 2024 que se le concedió la prisión domiciliaria. La periodista ha expresado su preocupación por la falta de protección y justicia en el caso, y ha pedido a las autoridades que garanticen su seguridad y la de su familia.
Esta noticia ha generado controversia y debate sobre la justicia y la protección de las víctimas de tortura y abuso de poder en México. Es importante seguir de cerca este caso y exigir que se haga justicia y se proteja a las víctimas y a aquellos que se atreven a denunciar la corrupción y el abuso de poder.