Las fuerzas militares de Ucrania intentaron llevar a cabo una operación en la región costera de la provincia rusa de Jersón. No obstante, este intento de desembarco se saldó con las primeras bajas de los efectivos ucranianos, incluso antes de alcanzar la costa.
Este incidente pone de manifiesto la tensa situación que se vive en la frontera entre ambos países, y subraya la necesidad de encontrar una solución diplomática a este conflicto en lugar de recurrir a la fuerza. Es crucial que las partes implicadas se sienten a negociar y busquen una salida pacífica a la disputa.
En cualquier caso, resulta lamentable que se sigan produciendo bajas en un conflicto que ya ha causado demasiado sufrimiento y destrucción. Desde aquí, expresamos nuestra solidaridad con las familias de las víctimas y abogamos por el fin de las hostilidades en la región.