El Bayer Leverkusen, bajo la tutela de Xabi Alonso, se midió el pasado miércoles en un amistoso de pretemporada al Arsenal, a solo una semana de la Supercopa Alemana en la que se enfrentarán al Stuttgart. Contrario a las expectativas, el partido no resultó ser un empate, sino una aplastante victoria de los londinenses, quienes no dieron tregua a los actuales campeones alemanes.
La primera mitad del encuentro ya indicaba el rumbo del partido, con el Arsenal arriba en el marcador 3-0 al descanso. La segunda mitad no mostró una mejoría significativa, con un gol de cada equipo, el marcador finalizó 4-1 a favor de los ingleses. Xabi Alonso no ocultó su insatisfacción con el rendimiento de sus jugadores, y su expresión y declaraciones al salir del Emirates Stadium así lo reflejaban. Alonso reconoció que no fue una buena actuación y que se trató de una señal de alerta, ya que el equipo estuvo muy por debajo de su nivel.
El técnico español fue claro en cuanto a la necesidad de concentración y envió un mensaje: es necesario dejar atrás la temporada pasada y enfocarse en la nueva para ser competitivos y tener una mentalidad ganadora. A pesar de los recientes triunfos del Leverkusen, que culminó la temporada pasada con un doblete histórico, Alonso está convencido de que no les ayudará si continúan con este nivel de juego. Como él mismo declaró, en el fútbol, el pasado no te da puntos, no te hace ganar partidos.
Sin embargo, Alonso confía en que de los errores se aprende y se fortalece, y espera utilizar este partido de manera positiva. Aunque el partido no resultó ser el esperado y las declaraciones de Alonso no fueron las más optimistas, el técnico espera que este encuentro sea solo un pequeño revés y que sus jugadores estén a la altura en el futuro. Concluyó con la esperanza de que el equipo regrese a estadios como el Emirates en la Champions League, pero con una actitud diferente. Tenía la sensación de que no estábamos preparados para este partido, dijo Alonso al finalizar.