El presidente colombiano, Gustavo Petro, y su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, han asumido un rol fundamental en la disminución de las tensiones y el cese de las sanciones y acciones en contra de Venezuela, luego de las elecciones del 28 de julio. Petro resaltó la importancia de un escrutinio transparente y la necesidad de garantizar la paz y la democracia, subrayando que la solución a la crisis venezolana debe provenir del país y no de naciones extranjeras.
En respuesta a las declaraciones de la líder opositora María Corina Machado, quien elogió la postura de la cancillería colombiana en la OEA, Petro recalcó que no corresponde a gobiernos externos decidir quién gobierna en Venezuela, sino a los propios venezolanos. Petro también cuestionó las declaraciones del subsecretario de Estado de EE.UU., Brian Nichols, quien proclamó a Edmundo González como ganador de las elecciones, a pesar de los resultados oficiales del Consejo Nacional Electoral CNE que otorgaron la victoria a Maduro.
El presidente Maduro, luego de denunciar un supuesto hackeo al CNE desde Macedonia del Norte, acudió al Tribunal Supremo de Justicia TSJ para procesar y recibir las actas electorales de los partidos políticos. Sus aliados destacan la transparencia del sistema comicial y exigen al mundo que no proclame a un presidente desde el exterior, al tiempo que solicitan claridad en la divulgación de las actas electorales.
Los líderes de México y Brasil, López Obrador y Lula, respectivamente, han mostrado su apoyo a Petro y han criticado la injerencia de la OEA en los asuntos venezolanos. Lula, en particular, ha actuado como intermediario entre este grupo de presidentes y Washington, logrando un comunicado conjunto con el presidente Biden que busca atenuar las tensiones. Los presidentes de Colombia, México y Brasil han emitido un comunicado conjunto exhortando a la oposición venezolana a actuar con cautela y a las autoridades electorales a dar a conocer los resultados desglosados por mesa de votación. Sin embargo, no se hace mención sobre el traslado del proceso comicial al TSJ, como lo solicitó Maduro.