Han transcurrido siete días desde la captura de los líderes del Cártel de Sinaloa, Ismael Zambada y Joaquín Guzmán López, y el gobierno mexicano encabezado por Andrés Manuel López Obrador aún no cuenta con información clara sobre cómo se desarrolló dicha detención. Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, el mandatario desmintió la versión inicial que señalaba que el vuelo en el que fueron trasladados a Texas despegó desde el estado de Sonora.
El presidente López Obrador indicó que el gobierno mexicano está a la espera de recibir un informe detallado sobre los hechos por parte del gobierno de Estados Unidos, antes de proporcionar mayores detalles al respecto. Además, mencionó que hay diferentes versiones sobre si la detención se llevó a cabo mediante un acuerdo o si se trató de un secuestro, por lo que se desea contar con la información completa antes de hacer cualquier tipo de declaración.
El mandatario también subrayó la importancia de que, a pesar de la detención de los líderes del cártel, no se hayan presentado hechos violentos en la región de influencia del Cártel de Sinaloa, y recalcó que el objetivo principal es garantizar la paz y la tranquilidad de los ciudadanos.
En cuanto a la posibilidad de que el gobierno de Estados Unidos no quiera proporcionar más detalles sobre la detención, López Obrador señaló que se dará a conocer la información disponible, independientemente de las acciones del gobierno norteamericano. El presidente ha mantenido una buena relación con los gobiernos de Estados Unidos, tanto con el expresidente Donald Trump como con el actual presidente Joe Biden, y se espera que continúe así en el futuro.
Es importante destacar que tanto Ismael Zambada como Joaquín Guzmán López tienen un largo historial criminal en Texas y Ciudad Juárez, con acusaciones por narcotráfico, secuestros y asesinatos. Por lo tanto, su detención es un gran logro en la lucha contra el crimen organizado en la región.