El desenlace en la situación de Dovbyk y su posible salida del Girona hacia la Roma se vislumbra cada vez más cercano. Después de que el traspaso a el Atlético de Madrid no se concretara, el delantero parece enfocar su interés en unirse a un proyecto de Europa League en lugar de continuar con el ambicioso plan de Champions del Girona.
Por otro lado, el director deportivo de la Roma, Florent Ghisolfi, ha llegado a Girona con la intención de desbloquear el fichaje del jugador ucraniano. Sin embargo, el club gerundense no tiene margen de negociación, ya que solo aceptará los 40 millones que conforman la cláusula de Dovbyk, aunque existe la posibilidad de que una parte de este monto sea abonada en forma de variable.
La ilusión de Dovbyk por jugar en el Atlético de Madrid parece haber desvanecido en un corto periodo de tiempo, y ahora se siente entusiasmado por la perspectiva de marcharse a la Serie A. Mientras tanto, el Girona se enfrenta al desafío de encontrar un delantero confiable para su temporada en Champions, lo cual no será una tarea sencilla para la dirección deportiva, considerando el contexto actual del mercado.
En otras noticias, el Girona está interesado en el fichaje de Imran Louza, y el director deportivo de la Roma ha sido visto en Montilivi, lo que sugiere que el culebrón Dovbyk está cerca de llegar a su fin. La pregunta que queda en el aire es quién será el reemplazo de Dovbyk en el Girona y cómo afectará esto al equipo en su mayor desafío hasta la fecha, la temporada de Champions.