Seguridad en México: ilusión o progreso en vísperas de elecciones

Durante el proceso electoral que finalizó el 2 de junio, en México se eligieron más de 19.000 cargos de elección popular, lo que pudo influir en la percepción de seguridad de la población, según Javier Oliva Posada, experto en seguridad nacional.

El ruido electoral generado por los desplazamientos, marchas, mítines y concentraciones durante tres meses alteró la normalidad en el país. Oliva sugiere que esto pudo haber incidido en la baja percepción de seguridad.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana ENSU del Instituto Nacional de Estadística y Geografía INEGI, en junio de 2024, el 59,4% de la población consideró que es inseguro vivir en su ciudad. Aunque este porcentaje puede parecer alto, en realidad representa el segundo número más bajo desde el inicio del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, y es el más bajo en más de una década.

En septiembre de 2013, el indicador de percepción de inseguridad estaba cerca del 70%, y en junio de 2018 superó el 75% a nivel nacional. Sin embargo, es importante destacar que, aunque la percepción de inseguridad ha disminuido, los datos oficiales sobre violencia y criminalidad indican que el gobierno de López Obrador terminará con el mayor número de homicidios dolosos en la historia del país.

Desde enero de 2019 hasta junio de 2024, se han abierto 151.042 carpetas de investigación por homicidio doloso, la cifra más alta en la historia de México. A pesar de esto, el gobierno ha logrado generar una mayor percepción de seguridad, según los datos de la ENSU del INEGI.

El presidente López Obrador ha utilizado frases cortas y aceptadas por la población, como abrazos, no balazos, lo que podría explicar en parte este fenómeno. Sin embargo, el académico Oliva señala una enorme confusión metodológica en los reportes del gobierno federal y del INEGI, lo que podría ser una causa adicional de la disminución de la percepción de inseguridad.

La ENSU también revela una disminución en el porcentaje de la población mexicana que tiene una mala expectativa sobre la seguridad en el país. En contraste, el 18,8% de la población de 18 años y más cree que la situación de la delincuencia e inseguridad en su ciudad seguirá igual de bien, y el 28,7% considera que mejorará en los próximos 12 meses.