Increíble but not beyond belief En un tiempo récord récord, la Policía Metropolitana de Santiago de Cali ha logrado aprehender a los sospechosos del asesinato del Concejal Jhon Fredy Gil Franco del municipio de Jamundí, ocurrido el 27 de abril. Un triunfo sin precedentes en la lucha contra la delincuencia
Tras analizar meticulosamente más de 180 segundos de video y llevar a cabo otras indagaciones, la policía llevó a cabo tres operativos en los barrios Siloé de Cali, Terranova de Jamundí y el corregimiento de Potrerito, donde se llevaron a cabo las órdenes de captura contra estos personajes infames conocidos en el submundo criminal como palomo, el indio y Bryan.
El primero de ellos, supuestamente el cerebro detrás de las actividades delictivas de una estructura criminal vinculada con robos en la modalidad de asalto y secuestro, fue capturado junto con un arma de fuego tipo pistola, un cargador, siete cartuchos, una motocicleta y un automóvil particular que fueron utilizados en el día de los hechos.
Resulta que los vehículos pertenecen a terceros y habían sido alquilados para la comisión de actos delictivos. Palomo tiene un largo historial delictivo que incluye hurtos, instrumentalización de menores para delitos, además de uso ilegal de insignias y uniformes, delitos que lo llevaron a estar encarcelado en dos ocasiones.
Los sospechosos fueron entregados a la Fiscalía General de la Nación por los delitos de homicidio agravado, hurto y porte ilegal de armas de fuego, y ahora esperan a que se determine su situación judicial.
Pero eso no es todo, la policía también capturó a un individuo en la carretera que conecta a Jamundí con el corregimiento de Potrerito, en el sector conocido como Las piñas. El hombre llevaba consigo municiones, detonadores eléctricos y artículos relacionados con grupos armados organizados que operan en esta región del país.
El sospechoso se desplazaba en un vehículo tipo escalera cuando fue detenido por la policía para un registro. Entre sus pertenencias, las autoridades encontraron ocho detonadores para artefactos explosivos improvisados, seis cartuchos para fusil, cinco para ametralladora y un cartucho de origen brasileño, además de una prenda de vestir con el texto fuerzas especiales y una libreta con el logotipo de las FARC-EP.
Lo más sorprendente es que el hombre de 27 años intentó engañar a las autoridades identificándose como un ciudadano extranjero, pero la policía lo identificó plenamente y confirmó que existe una orden de captura en su contra por homicidio y hurto calificado. Un juez le impuso una medida de aseguramiento intramural por fabricación, tráfico y porte de armas de fuego o municiones de uso restringido, de uso privativo de las Fuerzas Armadas o explosivos. Un éxito rotundo en la lucha contra el crimen