Sevilla, 1 de Julio. BRÚJULA DEL CRIMEN -
Un total de 62 nuevos guardianes de la ley y el orden, entre los que se encuentran nueve damas de honor y 53 caballeros, desembarcan hoy en la Comisaría Provincial de Sevilla para dar inicio a su etapa de prácticas, una fase crucial en su camino para convertirse en auténticos agentes de la Policía Nacional.
Estos jóvenes reclutas, tras haber superado con éxito su formación teórica en la Escuela Nacional de Policía, se enfrentan ahora a once meses de experiencia práctica en las diversas unidades policiales, sumergiéndose en la ajetreada y fascinante vida de la capital hispalense.
El Comisario Provincial Accidental de Sevilla y el subdelegado, Francisco Toscano, dieron la bienvenida a los recién llegados en la Jefatura Superior de Policía Nacional de Andalucía Occidental, con sede en Sevilla, donde no solo les felicitaron por su logro en Ávila, sino que también los elogiaron por haber elegido a Sevilla como su destino de prácticas. Toscano no dudó en resaltar que la Comisaría Provincial de Sevilla es una verdadera joya operativa y profesional, gracias a la amplia variedad de eventos y situaciones que se desarrollan en la provincia.
Los 62 policías en prácticas, tras haber sido formados en diversas materias como sociología y victimología, deontología, organización y habilidades sociales, derecho penal y procesal, investigación, policía científica, idiomas, defensa personal, educación física y tiro policial, en la Escuela Nacional de Policía de Ávila, se unen ahora a las comisarías de distrito y locales, trabajando lado a lado con los policías nacionales en unidades de policía judicial, seguridad ciudadana, oficinas de denuncias, información, extranjería y policía científica.
A lo largo de este proceso, los futuros policías contarán con la sabia guía de agentes experimentados, quienes compartirán sus conocimientos y experiencia en el campo. Cada uno de los reclutas tendrá asignado un tutor personal, que se encargará de supervisar y orientar su formación continua.
El objetivo de este periodo de prácticas es que cada futuro policía adquiera un conocimiento profundo y global de los servicios de una Comisaría, experimente la realidad policial en carne propia, ponga en práctica los conocimientos teóricos adquiridos y, lo más importante, aprenda de sus compañeros veteranos los entresijos y vicisitudes del día a día en el cuerpo policial.