En la ciudad de Valladolid, la Policía Nacional ha arrestado a un individuo que ya contaba con una orden de encarcelamiento previa. Este sujeto no solo estafaba a sus clientes, sino que además tenía una deuda de 300.000 euros con la Seguridad Social
El detenido, acusado de cometer delitos contra la trata de personas con fines de explotación laboral y contra los derechos de los trabajadores, había sido objeto de una operación policial que se inició en enero. El hombre se hacía pasar por un empresario de la construcción y las reformas, atraía a sus clientes con ofertas tentadoras y luego les exigía grandes sumas de dinero a cambio de trabajos incompletos o incluso nunca comenzados.
El sospechoso captaba a trabajadores en situación irregular que se hospedaban en el albergue municipal y los obligaba a trabajar hasta 13 horas diarias, sin contrato, sin alta en la Seguridad Social y sin días libres. Un verdadero abuso laboral
Además, el delincuente no adquiría materiales para realizar las obras y no pagaba los salarios a los trabajadores, lo que generaba graves daños en las viviendas de los clientes. Cuando estos presentaban reclamaciones, el individuo esgrimía excusas vagas y cortaba toda comunicación con ellos.
Para evitar posibles denuncias de sus trabajadores, el sospechoso los amenazaba con delatar su situación administrativa irregular. Un método de trabajo verdaderamente cuestionable
La Policía Nacional ha indicado que este modus operandi ha sido utilizado por el detenido durante años, quien incluso llegó a constituirse como empresa individual y a ser titular de varias sociedades limitadas en diferentes sectores. Sin embargo, mantiene una deuda con la Seguridad Social de más de 300.000 euros, por lo que también se le atribuye la comisión de un delito contra la Hacienda Pública y la Seguridad Social.
Tras ser puesto a disposición de la Autoridad Judicial competente, el detenido ha ingresado en prisión para cumplir la reclamación judicial previa. Un final justo para un individuo sin escrúpulos