Drama en las calles de La Granja Un lujoso automóvil, equipado con un sofisticado sistema de GPS, desapareció sin dejar rastro en la comuna de Nuñoa. La noticia de su desaparición causó conmoción y alarmó a las autoridades, quienes temían que el vehículo fuera desmantelado y sus piezas vendidas en el mercado negro.
Sin embargo, la policía no se rindió fácilmente La Brigada de Investigación Criminal Macul recibió la denuncia y se puso inmediatamente en acción. Tras una minuciosa investigación, los detectives rastrearon el último destino conocido del automóvil hasta una vivienda sospechosa en la populosa población San Gregorio.
Al llegar al lugar, los oficiales encontraron algo verdaderamente impactante: el vehículo robado estaba siendo desmantelado en vivo Dos hombres fueron sorprendidos en el acto, trabajando arduamente para desarmar el automóvil, que ya había sido desmantelado en un 70%. No se necesita ser un genio para darse cuenta de que algo sospechoso estaba pasando allí
Los sospechosos no pudieron negar su participación en el delito y fueron detenidos en el acto por receptación flagrante. Pero la historia no terminó allí. Al registrar la vivienda, la policía descubrió un taller clandestino lleno de motores, piezas y repuestos de al menos ocho vehículos diferentes, muchos de ellos con denuncias activas por robo.
El jefe de la Brigada de Investigación Criminal Macul, el prefecto Cristian Lara, destacó la importancia del sistema de GPS y la denuncia oportuna en la resolución del caso. Tenemos grupos criminales especializados que pueden desarmar y hacer desaparecer por completo un vehículo en menos de 24 horas, dijo Lara. La idea es fomentar el uso de estos dispositivos de rastreo, ubicarlos en lugares estratégicos y realizar la denuncia lo antes posible.
En resumen, la policía salvó el día gracias a su rápida acción y su determinación inquebrantable El vehículo robado fue recuperado y dos sospechosos fueron detenidos, gracias a la valiosa información proporcionada por el sistema de GPS y la denuncia oportuna de la empresa aseguradora. Justicia fue hecha una vez más en las calles de La Granja