CÁNTICOS DE HORROR EN EL BARRIO DE SON GOTLEU DE PALMA La Policía Nacional pone fin a la ola de terror causada por dos jóvenes okupas. A sus temerarias acciones, nada ni nadie podía hacerles frente. Sin embargo, la justicia ha llegado y ha puesto a estos delincuentes tras las rejas.
El pasado domingo, en plena madrugada, el barrio de Son Gotleu se vio sacudido por el estruendo de una puerta que se desmoronaba. Los vecinos, aterrorizados, se escondieron en sus casas mientras la Policía Nacional se apresuraba al lugar de los hechos.
Los agentes fueron alertados por una empresa de seguridad, después de que saltara la alarma en una vivienda. Al llegar, se toparon con una escena digna de una película de terror: una puerta cerrada y silencio absoluto en el interior. Tras varios intentos infructuosos de comunicación, los policías advirtieron que echarían abajo la puerta. Y así lo hicieron
En ese momento, los temidos okupas abrieron la puerta, como si nada hubiera ocurrido. La Policía encontró en el interior a varias personas y una puerta anti-okupa fracturada. Increíble, pero cierto La de entrada había sido recién reemplazada, con espuma fresca en el marco.
La empresa de seguridad ha tenido que trabajar sin descanso para restablecer la alarma, reparar una ventana y reemplazar la puerta anti-okupa. Los daños ascienden a la friolera de 1.300 euros.
Pero la pesadilla no acabó allí. Resulta que el día anterior, la empresa de seguridad ya había acudido por un hecho similar. Los okupas estaban al acecho Sin embargo, en esa ocasión no habían logrado entrar al interior de la vivienda.
Ante tales hechos, la Policía Nacional no dudó en actuar y detuvo a los dos jóvenes, ambos españoles, como presuntos autores de un delito de daños y ocupación de vivienda. La justicia, por fin, ha llegado al barrio de Son Gotleu.