Atención, fanáticos del fútbol El presidente de los legendarios Reds, Tom Werner, ha desatado una ola de controversia con su propuesta de llevar partidos de la Premier League a tierras lejanas, como Nueva York, Tokio y otros destinos exóticos. Sí, leíste bien Werner quiere llevar el fútbol inglés a un nuevo nivel, y no todos están contentos con esta idea.
En el corazón de la tormenta se encuentra la propuesta de Werner de organizar una ronda adicional de partidos fuera del Reino Unido, una idea que recuerda al polémico Partido 39 propuesto por el ex presidente de la Premier League, Richard Scudamore, hace más de una década. La idea ha sido recibida con escepticismo y críticas por parte de los aficionados, y no es difícil entender por qué.
Werner, un empresario estadounidense con sede en Boston, Massachusetts, ha expresado su deseo de llevar el fútbol inglés a nuevas fronteras, incluso planteando la posibilidad de jugar partidos en Nueva York, Tokio, Los Ángeles, Río de Janeiro y Riad en un solo día, como parte de una celebración global del fútbol y la Premier League. Sin embargo, esta visión no ha sido bien recibida por todos, y el propio John Henry, copropietario del Liverpool, ha dejado claro que no es algo que defienda especialmente.
El club de Merseyside ha emitido un comunicado en el que asegura que la propuesta de Werner es solo una idea personal y que no está siendo considerada por el club. Además, han garantizado que cualquier decisión al respecto será consultada previamente con la junta de aficionados, de acuerdo con su acuerdo con dicha junta.
Esta no es la primera vez que el fútbol europeo intenta expandirse a los Estados Unidos. LaLiga ya ha intentado organizar partidos en el pasado, y el FC Barcelona tuvo que retirar sus planes de jugar un partido de liga contra el Girona en Miami en 2019 debido a la falta de apoyo. La Federación Española RFEF también ha organizado la Supercopa de España en Arabia Saudí en los últimos años, lo que ha generado críticas de los aficionados.
En definitiva, la propuesta de Werner ha desatado un debate apasionado sobre el futuro del fútbol inglés y su posible expansión global. Mientras algunos ven esto como una oportunidad emocionante para llevar el juego a nuevas audiencias, otros temen que esto pueda socavar la integridad y la tradición del fútbol inglés. Solo el tiempo dirá si la visión de Werner se hará realidad o si el fútbol inglés seguirá siendo un tesoro nacional, disfrutado en vivo y en directo por millones de aficionados en el Reino Unido y en todo el mundo.