Joven aprehendido por la Policía tras apuñalar salvajemente a otro con botella fragmentada

PALMA, 6 Jun. Agencia de Noticias - Un joven colombiano de 22 años detenido por una brutal agresión en Manacor La Policía Nacional lo ha arrestado como presunto autor de una tentativa de homicidio, amenazas graves y lesiones. Imagínense Todo por una botella rota

Los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado, en una plaza del centro de Manacor, donde un grupo de jóvenes que disfrutaban de una noche de fiesta se dirigían a comer. De repente, un individuo apareció de la nada, blandiendo una botella como arma. Increíble, pero cierto

El sospechoso, sin mediar palabra, rompió la botella contra la pared y se lanzó al ataque, profiriendo amenazas de muerte. Una chica del grupo cayó al suelo, y otro joven, al intentar ayudarla, recibió un golpe en la cara, comenzando a sangrar por la nariz. El terror se apoderó del lugar

Pero no acabó ahí. Otro joven intentó separar al agresor, y en el forcejeo, ambos cayeron al suelo. El sospechoso, con la botella rota, asestó varios cortes y puñaladas en el cuello, cabeza y espalda del joven, que quedó desplomado y perdiendo mucha sangre. Una escena digna de una película de terror

La Policía Nacional acudió al lugar y atendió al herido, que fue trasladado a un centro hospitalario donde recibió asistencia médica urgente. El joven sufrió heridas cortantes que requirieron cerca de 40 grapas y puntos de sutura. Un milagro que siga con vida

Tras las investigaciones, el Grupo de Policía Judicial de la Policía Nacional descubrió que el sospechoso ya había estado involucrado en hechos similares, utilizando una botella de cristal rota como arma. Un peligroso individuo con un historial delictivo preocupante

Los agentes llevaron a cabo un operativo para localizar al sospechoso, que no tenía domicilio conocido, y finalmente lo arrestaron el pasado martes por la mañana. La justicia ha hecho su trabajo

Este incidente nos recuerda la importancia de estar alerta en todo momento y evitar situaciones de riesgo. La violencia no tiene cabida en nuestra sociedad