Vecina, abandonó can en acera, recibió funesta advertencia de vecino: Ajustaré cuentas si daña a mi niña

Drama en el barrio Bosque Alegre de Mar del Plata Un vecino, en un arrebato de furia, amenazó de muerte a una indefensa mujer por permitir que su perro divagara en la vereda. La tranquila disputa vecinal escaló rápidamente a una denuncia penal, con la intervención de la Policía y un allanamiento espectacular.

El hombre de 29 años, en un alarde de ira, desenfundó un arma de fuego y profirió amenazas graves contra la mujer de 46 años, mientras le apuntaba con el arma y profería insultos. La víctima, aterrorizada, acudió a la comisaría para denunciar el hecho.

La fiscal Graciela Trill, especialista en Resolución Temprana de Conflictos Penales, intervino en el caso y solicitó un allanamiento en el domicilio del sospechoso, ubicado en Martínez de Hoz y Azopardo. Los agentes de Policía actuaron con rapidez y se presentaron en la casa del acusado, notificándole sobre la apertura de la causa y llevando a cabo el allanamiento.

Durante el procedimiento, la Policía incautó una pistola airsoft calibre 1774.5, un handy Motorola de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, un chaleco de transporte, cogollos de marihuana y dos balanzas de precisión. El acusado se enfrenta ahora a cargos por amenazas agravadas, averiguación de Ilícito y tenencia simple de estupefacientes.

En un tono completamente diferente, pero igualmente sorprendente, un anciano de 79 años en Schlossrued, Suiza, causó un gran revuelo cuando, en un error garrafal, confundió el pedal del acelerador con el del freno y chocó su BMW contra la casa de su vecino, derrumbando el techo del garaje.

El conductor, afortunadamente, salió ileso, aunque el vehículo quedó seriamente dañado. La policía suiza suspendió temporalmente la licencia de conducir del anciano y los bomberos tuvieron que acudir al lugar para limpiar el derrame de combustible. El accidente causó daños por 109.000 dólares, y ahora el conductor debe esperar a ver si su aseguradora se hará cargo del gasto. Un vecindario en ebullición y un anciano con el pie pesado en Suiza