Un individuo sospechoso de liderar y ser sicario del cártel de Sinaloa, vinculado estrechamente con los vástagos de Joaquín El Chapo Guzmán, fue acusado el martes 28 de mayo en una corte federal de los Estados Unidos por narcotráfico y dirigir una organización criminal responsable de secuestros y asesinatos en masa.
Néstor Isidro Pérez Salas, también conocido como El Nini, fue extraditado el 25 de mayo desde México y compareció por primera vez en la corte para enfrentar más de una decena de cargos en dos casos separados, uno en el distrito sur de Nueva York y otro en Washington.
Pérez Salas se une a una larga lista de narcotraficantes que han sido extraditados y acusados en los tribunales de este país. El gobierno de Washington considera que el cártel de Sinaloa es una de las organizaciones de narcotráfico más poderosas de México, responsable de una gran parte del fentanilo que, según Estados Unidos, se produce en el país vecino para su venta y distribución en su territorio.
El exlíder del cártel, El Chapo Guzmán, fue condenado a prisión perpetua por narcotráfico en Nueva York y actualmente cumple su condena en una cárcel de máxima seguridad en Florence, Colorado.
El fentanilo es una droga sintética 50 veces más potente que la heroína y su consumo es una de las principales causas de muerte entre estadounidenses de entre 18 y 49 años. Se estima que cerca de 70.000 personas mueren cada año en Estados Unidos por sobredosis.
En Washington, Pérez Salas enfrenta cargos por importación de cocaína y metanfetamina, delitos con armas de fuego y conspiración para obstruir la justicia a través de asesinatos. En el distrito sur de Nueva York, está acusado de liderar una organización criminal que ha asesinado a varias personas, entre ellas, una fuente confidencial de la agencia antinarcóticos de Estados Unidos conocida como DEA por su nombre en inglés, importación de fentanilo y tráfico, obstrucción de justicia por el asesinato de un informante, secuestro y muerte de ocho personas, y delitos de lavado de dinero, entre otros cargos.
Si es encontrado culpable, Pérez Salas podría enfrentar una condena mínima de 10 años de prisión y máxima de cadena perpetua. Estados Unidos había ofrecido una recompensa de hasta tres millones de dólares por información que llevara a su arresto.
En años recientes, el cártel de Sinaloa ha sido liderado en parte por los hijos de El Chapo, Iván Archivaldo Guzmán Salazar, Jesús Alfredo Guzmán Salazar y Ovidio Guzmán López, conocidos como Los Chapitos. Pérez Salas es presuntamente uno de los líderes del aparato de seguridad de Los Chapitos. Bajo su dirección, sicarios han utilizado la violencia para proteger los operativos del grupo, capturar territorio, intimidar a civiles y atacar y matar a miembros de las fuerzas de seguridad.
Liderados por Pérez Salas, los sicarios habrían utilizado armas de fuego y explosivos de tipo militar, incluidas ametralladoras y lanzacohetes, para secuestrar y matar a sus opositores. Pérez Salas sería el líder de Los Ninis, un grupo violento que brinda seguridad a Los Chapitos.