La gran cita contra el racismo en el fútbol mundial está a la vuelta de la esquina. El 74 Congreso de la FIFA, que tendrá lugar en la exótica Bangkok, será el escenario donde se discutan y aprueben posibles medidas para erradicar este flagelo. El punto número 12 del orden del día, titulado Posturas globales contra el racismo, será el centro de atención de la agenda.
Gianni Infantino, el hombre a cargo de la FIFA, ha dejado en claro su postura al respecto: El racismo y cualquier forma de discriminación son totalmente abominables e inaceptables. No tienen cabida en el fútbol ni en la sociedad. Los jugadores afectados cuentan con todo mi apoyo. Palabras contundentes que reflejan la determinación de la FIFA en combatir este problema.
Entre las medidas que se están considerando, Infantino ha sugerido la expulsión automática para el equipo cuyos aficionados cometan actos racistas y provoquen el abandono del partido. Además, se contemplan prohibiciones de acceso a estadios en todo el mundo y cargos penales para los infractores. Actualmente, el proceso de sanción consta de tres etapas: partido suspendido, partido reanudado y partido abandonado. Sin embargo, la FIFA busca endurecer las sanciones para aquellos que incurran en actos racistas.
Por otro lado, también se decidirá quién organizará el Mundial femenino de 2027. Las opciones en la lista son Brasil y la candidatura conjunta de Bélgica, Alemania y Países Bajos. Un informe reciente sitúa a Brasil como la opción mejor valorada, pero todo se decidirá en el congreso de mañana.
En resumen, el futuro del fútbol mundial en cuanto al racismo está en juego en el 74 Congreso de la FIFA. La determinación de Infantino y la FIFA de combatir este problema es clara, y esperamos ver medidas contundentes que envíen un mensaje claro de que no hay lugar para el racismo en el fútbol. Además, estaremos atentos a la decisión sobre la sede del Mundial femenino de 2027. Qué emoción