CATALUÑA EN VIDEOCONFERENCIA Los policias acusadores en el Caso Tsunami Democràtic exigen al Tribunal Supremo que revoque la decisión de la jueza Susana de Polo de permitir que el expresidente catalán Carles Puigdemont y el diputado del Parlament Ruben Wagensberg declaren a través de una pantalla. No pueden creerlo En un escrito, los dos agentes heridos en protestas atribuidas a la plataforma independentista Tsunami Democràtic insisten en que el interrogatorio debe llevarse a cabo personalmente. No te pierdas los detalles de esta historia surrealista
Los dos policías argumentan que no hay razones de seguridad o de orden público que justifiquen la declaración telemática y que solo los motivos de absoluta imposibilidad del acusado podrían justificar el uso de videoconferencias. Increíble Además, recuerdan que el instructor del procés, el juez Pablo Llarena, ha citado a Puigdemont y al resto de encausados a declarar de forma presencial.
Pero eso no es todo. La acusación a cargo del despacho Fuster Fabra Abogados ha informado de que Puigdemont y Wagensberg no han podido ser localizados en Francia. Un escándalo Los abogados argumentan que no se pueden cumplir los principios de inmediación, publicidad, oralidad y concentración que rigen el procedimiento penal.
La magistrada Susana Polo confirmó su decisión de tomar declaración voluntaria a Puigdemont y Wagensberg vía videoconferencia al entender que concurrían razones de utilidad dado el conocimiento general de que los investigados se encuentran fuera de España. Pero la acusación argumenta que la situación de estos sujetos es la contraria, de nula colaboración con la justicia. Una verdadera locura
En resumen, los policias acusadores en el Caso Tsunami Democràtic exigen que Carles Puigdemont y Ruben Wagensberg declaren de forma presencial en el Tribunal Supremo, argumentando que no hay razones de seguridad o de orden público que justifiquen la declaración telemática. La acusación también ha informado de que Puigdemont y Wagensberg no han podido ser localizados en Francia, lo que ha llevado a los abogados a argumentar que no se pueden cumplir los principios de inmediación, publicidad, oralidad y concentración que rigen el procedimiento penal. La justicia española nunca deja de sorprender