El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, anuncia una orden ejecutiva sensacional que protegerá los datos de ciudadanos estadounidenses contra países peligrosos como China, Rusia, Corea del Norte, Irán, Cuba y Venezuela, según altos funcionarios.
Esta orden, dirigida a "naciones de preocupación," representa la medida más audaz tomada por un presidente estadounidense en la historia.
La inteligencia estadounidense ha detectado que ciertos países consideran los datos personales de estadounidenses un "recurso estratégico" y están accediendo a ellos a través de intermediarios. El objetivo de estas naciones es comprender el comportamiento de la población estadounidense y utilizarlos contra Washington.
Además, los datos pueden ser robados para someter a ciudadanos estadounidenses a estafas, chantajes y otras violaciones de la privacidad. Algunas de las víctimas pueden ser miembros de las Fuerzas Armadas de EE.UU. o funcionarios de su Gobierno, lo que supone un riesgo aún mayor para Washington.
La orden ejecutiva prohibirá a las empresas que recopilan datos de estadounidenses la transferencia de información genómica, datos biométricos, datos de salud personal, datos de geolocalización, datos financieros y otros tipos de información personal a las "naciones de preocupación".
Sin embargo, la orden contemplará excepciones para empresas multinacionales que necesitan procesar, por ejemplo, nóminas o realizar transacciones financieras que involucran varios países.
El presidente Biden también ha negado planes de una base militar en Guyana en su disputa con Venezuela.