
Las cárceles mexicanas están repletas de historias, algunas con un trasfondo vulnerable y otras marcadas por episodios despiadados donde el perdón no tuvo lugar. A pesar de la finalidad común de reincorporar socialmente a los internos, los centros penitenciarios en México a menudo se ven empañados por la corrupción y la falta de recursos, lo que lleva a violencias continuas que dificultan este proceso.
La Comisión Nacional de los Derechos Humanos CNDH ha identificado 145 centros penitenciarios estatales con resultados desfavorables y 162 penales con alrededor de 132 mil 965 reclusos en riesgo de tener sus derechos humanos vulnerados. La crisis carcelaria en México se caracteriza por una sobrepoblación récord, menos cárceles y más presos.
Los estados con las peores calificaciones en sus centros penitenciarios incluyen a Baja California, Puebla, Michoacán, Chiapas, Hidalgo, Tamaulipas, Coahuila, Tabasco, Guerrero, San Luis Potosí, Nayarit y Zacatecas. Guerrero, en particular, reúne una gran cantidad de penales con múltiples áreas de oportunidad, como el Centro de Reinserción Social de Talpa de Comonfort y el Centro de Reinserción Social de Huimanguillo.
Las deficiencias en la gestión de los centros penitenciarios mexicanos incluyen una clasificación inadecuada de los reclusos, deficientes condiciones de higiene, falta de personal de seguridad y custodia, insuficiencia en el procedimiento para la imposición de sanciones disciplinarias, y carencias en la atención de quejas y actividades deportivas. Además, se enfrentan a problemas como deficiencias en los servicios de salud, insuficiencia o inexistencia de programas para la prevención de adicciones y desintoxicación voluntaria, sobrepoblación, hacinamiento y falta de actividades laborales o educativas.
Es fundamental abordar estas deficiencias en los centros penitenciarios mexicanos no solo para prevenir la reincidencia de los internos, sino también para garantizar la seguridad de las propias cárceles. La reinserción social eficaz puede desempeñar un papel crucial en reconstruir el tejido social desgastado del país.,