
La historia del narcotráfico en México es un tema complejo y en constante evolución. Uno de los personajes clave en su desarrollo fue Juan Nepomuceno Guerra, también conocido como Don Juan o el Padrino de Matamoros. Aunque no alcanzó la fama de otros capos como Joaquín El Chapo Guzmán o Rafael Caro Quintero, su amplia trayectoria delictiva lo convirtió en uno de los narcotraficantes más poderosos y temidos de México.
Don Juan es considerado el fundador del Cártel del Golfo, una de las organizaciones dedicadas al tráfico de drogas más antiguas y duraderas de México. Su origen se remonta a la década de 1930, cuando Tamaulipas era una zona fronteriza ideal para el contrabando de alcohol, tabaco y drogas hacia los Estados Unidos. Un hombre llamado Virgilio Barrera fue uno de los primeros en explotar esta ruta, y pronto reclutó a un joven llamado Juan Nepomuceno Guerra.
Con el tiempo, el carácter fuerte y las habilidades de Don Juan lo llevaron a convertirse en el líder de este grupo de contrabandistas, llamado Los Pasadores. Cuando los Estados Unidos prohibieron el alcohol en la década de 1920, Don Juan aprovechó la oportunidad para asociarse con gángsters estadounidenses, como Alphonse Gabriel Capone, y traficar bebidas alcohólicas a través de la frontera.
Después de la prohibición, el negocio de Don Juan se diversificó al contrabando de marihuana, amapola y, posteriormente, migrantes. Las ganancias le permitieron a Don Juan consolidar su poder y establecer conexiones políticas en Tamaulipas, donde algunos de sus familiares llegaron a ocupar cargos públicos.
A pesar de su trayectoria criminal, Don Juan era un personaje impune, protegido por sus conexiones políticas y su reconocimiento en la sociedad tamaulipeca. Sin embargo, su rígida personalidad y su participación en episodios violentos, como el asesinato del hijo de Pancho Villa en 1960, lo convirtieron en un personaje temido y respetado en el mundo del narcotráfico.
Después de su detención y liberación por el asesinato del hijo de Pancho Villa, Don Juan continuó operando su lucrativo negocio hasta que finalmente lo heredó a su sobrino Juan García Ábrego, quien llevó al Cártel del Golfo a nuevas alturas de poder y violencia. Hoy en día, el Cártel del Golfo sigue siendo una de las organizaciones criminales más poderosas de México, a pesar de que ya no existe como una sola entidad unificada.,