
Durante las últimas décadas, los Estados Unidos han ofrecido recompensas récord por información que llevara a la captura de líderes de cárteles de droga mexicanos, en el marco de su lucha contra el narcotráfico. A través del Programa de Recompensas por Narcóticos NRP, por sus siglas en inglés, el país ha puesto precio a las cabezas de los criminales más poderosos, cuyas organizaciones operan en ciudades clave de México y los Estados Unidos. En esta nota, profundizaremos en las cifras récord y los individuos a los que se les ofrecieron estas recompensas.
La recompensa más alta ofrecida por un narcotraficante mexicano fue de 20 millones de dólares, por Rafael Caro Quintero, cofundador del Cártel de Guadalajara. Quintero es buscado por secuestro, tortura y asesinato de Enrique Kiki Camarena, agente de la Administración de Control de Drogas DEA de los Estados Unidos. Actualmente, Quintero se encuentra encarcelado en el Centro Correccional Metropolitano de Brooklyn, Nueva York, y enfrenta un proceso legal en la Corte del Distrito Este de Nueva York, con la posibilidad de una pena de muerte.
Ismael El Mayo Zambada, cofundador del Cártel de Sinaloa, y Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación CJNG, han sido objeto de recompensas de 15 millones de dólares cada uno. Zambada fue capturado el 25 de julio de 2024 en Texas, mientras que Oseguera Cervantes fue objeto de una recompensa actualizada el 4 de diciembre de 2024.
Además, los hijos de Joaquín El Chapo Guzmán, Iván Archivaldo y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, también cuentan con recompensas de 10 millones de dólares cada uno, por su papel en el tráfico de fentanilo. Aunque Guzmán Loera, el líder del Cártel de Sinaloa, fue uno de los narcotraficantes más buscados en la década de 2000, el gobierno de los Estados Unidos solo ofreció una recompensa de 5 millones de dólares por información que condujera a su arresto.
En conclusión, la lucha de los Estados Unidos contra el narcotráfico ha llevado a la oferta de recompensas récord por la captura de los líderes de los cárteles de droga mexicanos más notorios. Si bien estas recompensas pueden ser efectivas para llevar a la justicia a estos individuos, también destacan la escalada de la guerra contra el narcotráfico y su impacto en ambos lados de la frontera.,