
Granada, 15 de mayo. El Ayuntamiento de Granada está evaluando si debe tomar medidas adicionales en relación al jefe de estudios de la Policía Local que se encuentra bajo investigación por supuestos delitos de violencia machista. La alcaldesa de la ciudad, Marifrán Carazo, ha dicho este jueves que están en contacto con el juzgado correspondiente y que actuarán en consecuencia si así se les solicita.
El polémico agente, que fue detenido esta semana por presuntamente violar una orden de alejamiento, se enfrenta a casi siete años de prisión por varios delitos relacionados con la violencia machista. A pesar de su situación judicial, continuará trabajando en tareas administrativas en la Policía Local.
La semana pasada, el juzgado le impuso la prohibición de acercarse a la presunta víctima y vivir en el municipio de Armilla, bajo la amenaza de nuevas medidas cautelares si vuelve a incumplir la orden. El agente ha negado las acusaciones en su contra, alegando fallos técnicos en el brazalete electrónico que debe llevar para mantenerse alejado de su expareja.
El pasado 4 de marzo, se abrió un juicio oral contra el agente por supuestamente cometer delitos de violencia física y psicológica habitual, menoscabo psíquico y descubrimiento y revelación de secretos. Ahora, enfrenta una petición fiscal de seis años y diez meses de prisión.
El PSOE de Granada ha exigido a la alcaldesa que revoque el nombramiento del agente como jefe de estudios de la Policía Local mientras dure el proceso judicial. Los socialistas consideran que se trata de una situación muy grave que requiere una acción decisiva y una postura firme en contra de la violencia machista. El abogado defensa ha argumentado que las denuncias anteriores de la mujer fueron retiradas o desestimadas por falta de pruebas.
En un caso separado, el Juzgado de Instrucción 4 de Granada está investigando a varios agentes policiales por supuestamente acceder ilegalmente a datos de la expareja del subinspector en el sistema de seguimiento de víctimas de violencia machista.,