En la madrugada del 2 de mayo de 2015, la fiscal de nombre falso, María Hernández, fue enviada urgentemente junto a un grupo de peritos, soldados y agentes a Villa Purificación, un pequeño pueblo en las montañas de Jalisco. El motivo de su viaje era investigar la caída de un helicóptero de la Fuerza Aérea, el cual había sido derribado por el Cártel Jalisco Nueva Generación CJNG.
La fiscal Hernández fue llamada a testificar en el juicio contra Rubén Oseguera González, alias El Menchito, acusado de tráfico de cocaína y metanfetamina, y posesión de armas de fuego. Durante su testimonio, Hernández declaró que existían indicios de que El Menchito había ordenado el derribo del helicóptero para evitar un operativo militar.
El día de los hechos, Hernández recibió la orden de viajar a Villa Purificación, ya que un helicóptero de la Sedena había sido atacado y un soldado resultó herido. Sin embargo, no pudo llegar al lugar sino hasta el día siguiente, donde comenzaron a recolectar evidencias, asegurar vehículos y a recuperar cuerpos. Todavía se escuchaban disparos en la zona durante la noche.
Durante cinco días, las autoridades aseguraron nueve camionetas, armas, granadas, cartuchos percutidos, radios y accesorios vinculados al CJNG. También encontraron los cuerpos de nueve sicarios y una camioneta con una torreta artesanal que presumiblemente contenía una ametralladora pesada calibre .50. Además, se aseguraron los propulsores y la munición de los RPG que fueron utilizados para atacar el helicóptero del ejército.
La fiscal Hernández declaró que en las camionetas encontraron cinturones para cargadores con hebillas que tenían grabado el apodo Jr, el cual corresponde al acusado, según varios testigos. También se encontraron las siglas CJNG y FEM, que significan Fuerzas Especiales Alto Mando, el comando de élite que protegía a Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho.
Además, se aseguraron seis relojes de lujo valuados en 6 millones de dólares, entre los que destaca uno con la silueta del estado de Jalisco grabada. Este reloj era portado por El Menchito, según un testigo colaborador.
Otro testigo, un ex policía municipal y guardaespaldas de confianza de El Mencho, reveló detalles sobre las operaciones del CJNG. También declaró que el día que el helicóptero fue derribado, escuchó a El Menchito dar la orden de disparar contra la aeronave del ejército a través de radios de comunicación.