La Suprema Corte de Justicia de la Nación SCJN ha rechazado una propuesta que exhortaba al Consejo de la Judicatura Federal CJF a garantizar la función jurisdiccional y detener el paro de labores impulsado por algunos jueces y magistrados, el cual ha estado afectando el derecho humano de acceder a la justicia. Esta iniciativa fue presentada por la ministra Lenia Batres Guadarrama y contó con el respaldo de Yasmín Esquivel Mossa, pero fue rechazada por nueve votos en contra.
La propuesta de Batres Guadarrama se materializó en un oficio dirigido a la presidenta de la Corte, Norma Piña Hernández, el pasado 30 de agosto, en el que advirtió que la única organización que ha reivindicado este paro es una asociación civil sin personalidad jurídica para promover un paro laboral, especialmente cuando la medida busca interrumpir las actividades de uno de los tres Poderes de la Unión.
Batres Guadarrama señaló que una asociación civil, por más que esté compuesta por personas juzgadoras, no tiene la autoridad para emitir declaraciones formales de suspensión de labores ni para establecer medidas que afecten directamente los derechos de terceros. Además, subrayó que el interés económico de los funcionarios judiciales no debe prevalecer sobre el de los trabajadores en general, ya que esto podría poner en peligro la confianza y credibilidad de la sociedad en el Poder Judicial.
Sin embargo, la propuesta no fue aceptada por la mayoría de los votos, lo que, según Batres Guadarrama, demuestra la falta de interés del pleno del CJF y de la SCJN para garantizar el derecho humano de acceder a la justicia, priorizando las preocupaciones económicas de los jueces y magistrados por encima del interés general de los mexicanos.
En cuanto a la reforma judicial, la nueva minuta mantiene la eliminación de las sesiones privadas entre ministros y ministras en la Suprema Corte de Justicia de la Nación, con el objetivo de transparentar todos los casos posibles. Las ministras Yasmín Esquivel Mossa y Lenia Batres Guadarrama consideran que no existe justificación para que todos los asuntos de la Primera y Segunda Sala de la SCJN se resuelvan en sesiones privadas, a veces incluso sin debate previo.