Un suboficial del Ejército, identificado como José Daniel Cabrera Gallardo, ha confesado ser el autor de la muerte y el enterramiento del empresario Nelson Ariel Romero en Santa Cruz, Argentina. Cabrera Gallardo, de 27 años, ya se encontraba detenido por el crimen, luego de que se hallaran manchas de sangre en su domicilio.
Tras su arresto, Cabrera Gallardo solicitó la presencia de su abogado y manifestó su intención de revelar la verdad. Según Jorge Trevotich, abogado defensor de Cabrera Gallardo, el joven confesó que las declaraciones previas no eran coherentes y que tenía información crucial que compartir.
Romero, de 56 años y oriundo de Villa de Merlo, San Luis, fue visto por última vez el 19 de agosto cuando salió de su casa en una camioneta Ford Ranger blanca, junto a su perro. Al día siguiente, la Policía encontró el vehículo con las ventanas rotas y manchas de sangre en su interior. Tras intensas búsquedas y varios allanamientos, Cabrera Gallardo emergió como el principal sospechoso del caso.
En la casa de Cabrera Gallardo, las autoridades descubrieron manchas de sangre que correspondían a Romero y varios objetos personales del empresario. Tras la confesión de Cabrera Gallardo, la Policía de Santa Cruz encontró el cuerpo de Romero en un terreno del barrio Ayres Argentinos de Río Gallegos, gracias a las coordenadas proporcionadas por el acusado.
Cabrera Gallardo, quien anteriormente negó su participación en el crimen, finalmente admitió su responsabilidad en las últimas horas. Su confesión es un hito importante en la investigación, ya que ahora los investigadores deben establecer el vínculo y los motivos detrás del asesinato de Romero.
Romero era dueño de un kiosco y había sido concejal en Villa de Merlo, San Luis. A pesar de que vivía en Río Gallegos desde hace años, era muy querido y respetado en su ciudad natal. La noticia de su muerte ha conmocionado a la comunidad de Villa de Merlo.