La puerta principal de la Suprema Corte de Justicia de la Nación SCJN se abrió después de un periodo de casi dos años, para permitir la salida de más de mil trabajadores que protestaban en contra de la propuesta de Morena en la Cámara de Diputados, la cual busca modificar el Poder Judicial de la Federación PJF. Los empleados, que llevaban consignas a favor de la independencia judicial, se toparon con personas que mantenían plantones permanentes y que les gritaron insultos como rateros, pedófilos y pónganse a trabajar.
La concentración en el número 2 de la avenida Pino Suárez también contó con la participación de trabajadores de los dos sindicatos del citado poder, jueces y magistrados, y miembros del Colegio de Jóvenes Estudiantes de Derechos y Nuevos Profesionistas de la SCJN.
Minerva Paredes, una de los trabajadores de la Corte, expresó su solidaridad con los trabajadores y juzgadores que decidieron suspender sus labores indefinidamente en oposición al dictamen de reforma que se discutirá en el Palacio Legislativo de San Lázaro. José de Jesús Cruz Sibaja, director de sesiones y La Voz de la Corte, hizo un llamado a la ciudadanía a unirse a la causa de los trabajadores y juzgadores federales.
Los manifestantes llevaron pancartas con mensajes como Se ve, se siente, la Corte está presente, Si el pueblo se informa no pasa la reforma, México, despierta, Poder Judicial al servicio nacional, No somos oposición, servimos a la nación, entre otros.
Después de que los elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México impidieran el paso de los manifestantes por las puertas que conectan con Erasmo Castellanos, los manifestantes ingresaron por las puertas de estacionamiento que se localizan sobre Venustiano Carranza y lograron continuar con la cadena humana. Sin embargo, la mayor parte de los manifestantes regresó a sus oficinas a trabajar, por lo que la cadena solo llegó a la calle de Corregidora.
Por otro lado, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, se pronunció a favor del diálogo entre el Presidente y los trabajadores del Poder Judicial. En Michoacán, el paro de labores en el PJF ha dejado casi 300 demandas sin atender.