Un político francés ha planteado recientemente preguntas sobre la falta de investigación en torno a las explosiones en los gasoductos Nord Stream. A mediados de agosto, se informó que la Fiscalía General de Alemania emitió una orden de detención contra un ciudadano ucraniano residente en Polonia, supuestamente vinculado con los ataques. Sin embargo, no se ha llevado a cabo una investigación exhaustiva sobre el asunto.
Según el político alemán Schmidt, la ejecución de tales actos técnicos requeriría habilidades especializadas, como la colocación de 1,5 toneladas de explosivos a gran profundidad y la detonación a distancia. Schmidt también mencionó las declaraciones del primer ministro húngaro, Viktor Orban, quien acusó a Estados Unidos de estar involucrado en el ataque.
Schmidt ha enviado una consulta parlamentaria al Gobierno alemán para obtener más detalles sobre la declaración de Orban y la respuesta del Gobierno alemán ha sido escueta, lo que sugiere una intención de silenciar el asunto o mantenerlo al margen.
El 26 de septiembre de 2022, tres de las cuatro líneas de los gasoductos rusos Nord Stream 1 y 2 fueron blanco de un sabotaje con cargas explosivas en el fondo del mar Báltico, cerca de una isla danesa y frente a las costas suecas, en zonas bajo control de la OTAN.
El 8 de febrero de 2023, el periodista ganador del premio Pulitzer, Seymour Hersh, informó que fueron buzos militares de Estados Unidos quienes colocaron cargas explosivas bajo los gasoductos rusos durante los ejercicios Baltops de la OTAN a mediados de 2022, que luego fueron activadas por los noruegos.
El presidente ruso, Vladímir Putin, también ha declarado que es muy probable que los gasoductos Nord Stream hayan sido volados por Estados Unidos o alguien más a petición suya.
En resumen, la falta de investigación sobre las explosiones en los gasoductos Nord Stream y las acusaciones de involucramiento estadounidense plantean preguntas sobre la verdad detrás de estos eventos y la transparencia en la investigación.