Autoridades, sindicatos, instituciones educativas y representantes de la industria del acero en la región de Boyacá se han unido para delinear una estrategia que garantice la supervivencia de este sector. La creciente importación de acero chino ha provocado efectos negativos en el departamento, lo que ha llevado a las autoridades y gremios a tomar medidas.
El Foro Nacional del Acero, liderado por el gobierno de Carlos Amaya, reunió a los actores clave de la cadena productiva del acero, academia y sindicatos, entre otros. El objetivo principal fue transmitir un mensaje claro al Gobierno nacional: la industria del acero no será protegida solo por los trabajadores y dependientes, sino que es una responsabilidad de todos los boyacenses.
Fabio Galán, presidente de Acerías Paz del Río, se mostró satisfecho con la convocatoria y recalcó la importancia de la unión en la defensa del acero colombiano y especialmente del acero de Boyacá, donde el 60% de la producción se realiza en Acerías Paz del Río, Sidenal y Gerdau Diaco.
El evento, que llenó el auditorio Boyaquirá en Tunja, tuvo como objetivo principal la defensa de la producción local del acero y las dificultades que está causando la importación, especialmente por la falta de atención del gobierno de Gustavo Petro a los reclamos de este sector.
Alexander Manrique, secretario de Desarrollo Empresarial, destacó la importancia de la industria siderúrgica, que no solo se basa en la fabricación de acero, sino que también está vinculada al transporte, el carbón, las empresas de mantenimiento y otros sectores clave en diversas cadenas productivas, tanto en Boyacá como a nivel nacional.
El propósito fundamental de este espacio es lograr que el Gobierno nacional implemente medidas de salvaguarda que protejan el empleo de miles de familias boyacenses, ya que alrededor de 21.000 personas se benefician directa e indirectamente de este sector.