Especialistas han examinado cuidadosamente el material genético de un pequeño infante que fue sepultado en el asentamiento de Paquimé, una de las localizaciones más extensas y elaboradas de la civilización mogollón, situada en el territorio mexicano de Chihuahua.
Es importante resaltar que este hallazgo proporciona información valiosa sobre las prácticas funerarias y la composición genética de los antiguos pobladores de la cultura mogollón. Los análisis de ADN pueden contribuir a una mejor comprensión de los vínculos familiares y las migraciones de estas antiguas sociedades.
El sitio arqueológico de Paquimé es un tesoro cultural que atestigua la sofisticación y el desarrollo alcanzado por la civilización mogollón. Su estudio permite a los científicos desentrañar los misterios de un pasado fascinante y arrojar luz sobre la vida y costumbres de aquellos antiguos pobladores.