En el sector de Pueblo Nuevo, perteneciente al municipio de Tuluá, dos menores sin escolaridad fueron arrestados en el acto mientras intentaban escapar en una motocicleta, luego de robar un teléfono celular de alto valor a un transeúnte. El teléfono, valuado en 2 millones de pesos, fue devuelto a su dueño, mientras que los sospechosos fueron entregados a la Fiscalía por el delito de hurto calificado y agravado.
En otro suceso, un indigente amedrentó a una comerciante con un arma cortopunzante en un establecimiento comercial del centro de Tuluá, apoderándose de sus pertenencias. Tras la denuncia ciudadana, la Policía Nacional llevó a cabo un operativo especial que resultó en la captura del agresor, quien tenía en su posesión los artículos robados y un cuchillo. El sospechoso, con siete registros judiciales por hurtos, lesiones y daños a propiedades ajenas, fue entregado a la Fiscalía y acusado de hurto calificado y agravado. Debido a las pruebas contundentes y su historial delictivo, un juez dictaminó una medida cautelar de encarcelamiento.
Por último, en las cercanías del centro comercial La Herradura, durante operativos de verificación de antecedentes de personas y vehículos, se capturó a un joven de 18 años mientras arrastraba una motocicleta que había sido robada en el parqueadero mediante el método de halado. La motocicleta, valuada en 6 millones de pesos, fue devuelta a su dueño, y el sospechoso fue entregado a la Fiscalía por el delito de receptación.