Ciudadanos venezolanos continúan manifestándose en las calles de Caracas, particularmente en el barrio de Petare, a pesar de la creciente represión gubernamental y la persecución de opositores. La tensión se ha intensificado luego de las elecciones presidenciales del 28 de julio, donde Nicolás Maduro fue declarado ganador con un 52% de los votos, según el Consejo Nacional Electoral CNE, de mayoría oficialista. Sin embargo, la oposición y varios países cuestionan los resultados y exigen la publicación de las actas electorales.
Las protestas han sido reprimidas por las fuerzas de seguridad, resultando en al menos 22 muertos y 2.000 detenidos, según el propio Maduro. Las cárceles de Tocorón y el Instituto Nacional de Orientación Femenina serán utilizadas para recluir a los detenidos, anunció el mandatario. La persecución ha alcanzado niveles aterradores, especialmente en zonas pobres que anteriormente apoyaban al chavismo.
La ONG Foro Penal de Venezuela ha verificado 988 arrestos relacionados con las protestas, entre los que se encuentra el abogado Kennedy Tejeda. Además, la Dirección de Contrainteligencia Militar DGCIM ha difundido videos con amenazas a la disidencia.
Las bases del chavismo, a través de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción Clap, Bases de Misiones, Unidad de Batalla Bolívar-Chávez y Consejos Comunales, están delatando y denunciando a vecinos que protestan. La situación también ha afectado a los periodistas, con al menos cinco comunicadores detenidos y 15 expulsados del país.
La Unión Europea ha pedido una verificación independiente de los resultados electorales y criticó la represión a las manifestaciones pacíficas. Maduro respondió calificando a la UE y a su alto representante de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, como una vergüenza.
Mientras tanto, el aeropuerto Simón Bolívar está abarrotado de venezolanos que desean salir del país, aprovechando la suspensión de la conexión aérea entre Caracas, Panamá y República Dominicana. Los precios de los pasajes se han disparado y las fechas están completas, lo que dificulta la salida de los ciudadanos.
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