Agente de policía fallece tras ser apuñalada en su hogar; Previamente había denunciado a excompañero y solicitado medidas de protección.

Una trágica noticia conmueve a la localidad bonaerense de Bolívar, en Argentina, donde una oficial de policía de 32 años identificada como Rocío González perdió la vida a manos de su expareja, Germán Olivare, de 38 años. El lamentable suceso tuvo lugar en el barrio Pompeya, dentro de la vivienda de la víctima, y se perpetró mediante repetidas puñaladas.

Testigos presenciales relatan que el agresor forzó la entrada al hogar de González y entabló una violenta discusión, culminando en el fatal ataque con un cuchillo. Al percatarse de los gritos, un vecino alertó a la policía, quienes al llegar encontraron a la mujer gravemente herida en la cocina y sin ropa interior. Olivare también presentaba heridas y se encontraba en un pasillo, cubierto de sangre y con la parte superior de su cuerpo desnuda.

La vivienda quedó manchada con rastros de sangre, y el agresor fue trasladado al Hospital Miguel Capredoni para recibir atención médica por un corte en el cuello. Posteriormente, la Unidad Funcional de Instrucción UFI N° 15 de Bolívar lo imputó por el delito de femicidio agravado por el vínculo.

Rocío González y Germán Olivare habían sido pareja y eran padres de una niña de cinco años. La mujer había denunciado reiteradamente a su expareja por violencia de género, e incluso solicitó una prohibición de acercamiento y hostigamiento el 9 de julio. No obstante, el juzgado solo aceptó el cese de los actos hasta el 10 de septiembre, rechazando las restricciones solicitadas.

El automóvil particular de Olivare, un Peugeot negro, fue hallado incendiado en las cercanías de la casa de la víctima, luego de que vecinos lo vieran circular por el barrio durante la noche. González se desempeñaba como sargento de policía en la Comisaría de la Mujer y la Familia, y su fallecimiento ha provocado una ola de indignación y consternación en la comunidad.

Tras conocerse el caso, familiares, amigos y compañeros de trabajo de la víctima se congregaron frente a su hogar, y el colectivo Ni Una Menos Bolívar organizó una marcha en el Centro Cívico de la ciudad para exigir justicia.